domingo, 14 de diciembre de 2014

¿Alguna vez te has puesto a pensar...

Hoy me encontré en facebook una frase que me llamó mucho la atención. Me dejó pensando sobre eso que decía, pero especialmente porque me puse en el caso contrario y ahora lo explico.

La frase es la siguiente:  "¿Alguna vez te has puesto a pensar en que si no hubieses conocido a cierta persona en tu vida, tu mundo sería totalmente diferente?"


Pues bien, mi cabecita loca, inmediatamente se ha puesto a pensar, pero planteando la pregunta en sentido contrario, es decir: "¿Alguna vez te has puesto a pensar en que si una persona no se hubiera marchado de tu vida, tu mundo seguiría siendo el mismo, y no serías lo que eres ahora, y no tendrías lo que tienes ahora, y no harías lo que haces ahora?"

Sinceramente ese es mi caso, porque en mi vida hubo personas que me condicionaron a "ser", a "tener" y a "hacer" lo que ellos quisieron. 

Es obvio que cuando una persona sale de tu vida, o mejor dicho, la sacas de tu vida, es porque no te hacia ningún bien. Son como una enfermedad, que cuando las sacas de ti es cuando sanas, te curas y comienzas a sentirte bien.

Es cierto que hay personas que llegan a tu vida y la mejoran, pero también hay otras que cuando las apartas de tu camino, tu vida mejora aún mas. Y es que, tengo la completa seguridad de que, todo lo que estoy viviendo ahora mismo, en tiempo atrás, no lo hubiera podido hacer, no me lo hubieran permitido, y no por ser malo lo que vivo ahora, todo lo contrario, son cosas muy bonitas con las que estoy creciendo personal y profesionalmente, pero no hubiera podido hacerlo. Así de claro.

Con todo esto, ¿que fue lo que aprendí?, pues aprendí que quien te quiera de verdad, tendrá que aceptarte tal y como eres. Con tus defectos y tus virtudes. Con tus amigos y tus aficiones. Con tus locuras y tu mal genio. Con tus risas y tus tonterías. Como eres y como no quieres ser. Con lo que tienes y no quieres tener. Con lo que haces y lo que no quieres hacer... en definitiva, contigo tal y como "eres", con todo lo que "tienes" y con todo lo que "haces". 

Y es que cuando hay respeto y confianza da igual lo que seas, lo que tengas o lo hagas.

Así de claro. 

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