De regreso y en pequeñas dosis...

¡¡Dios!! cuanto tiempo hacia que no escribía en mi blog. Pero claro, si te atan de pies y manos para hablar de un solo tema y no de lo que a mi me dé la gana, pues al final no te apetece escribir. Y es que hablar siempre de lo mismo aburre, y darle siempre protagonismo a los mismos también aburre. A mi me gusta hablar de todo, porque en la vida no todo es amor, amor y amor, y tu y yo, tu y yo... y tu y yo. Noooooooo!!! hay muchos temas que tratar y a partir de ahora no voy a permitir que nadie me diga lo que tengo o no tengo que hacer. Yo si cambié.

En todo este tiempo que he estado sin escribir me han pasado muchas cosas, unas buenas y otras malas. Unas que me hicieron feliz en algunos momentos y otras que me hicieron llorar hasta el punto del ataque de ansiedad, y si, no exagero esto último es completamente cierto. He sido muy feliz pero también he sufrido mucho. Pero bueno, estas cosas forman parte de eso que llaman "amor" ¿no?, o quizás no, no lo sé. Amor y sufrimiento no deberían ir de la mano puesto que son cosas totalmente contradictorias, pero bueno, la vida es así de contradictoria. Y ahora cambiemos de tema. 

Son tantas cosas las que me gustaría contar que he decidido darlas en pequeñas dosis, por capítulos. Y es que escribirlo todo en una sola entrada, además de que terminaríais supercansados de leer, habría gente que quedaría muy muy muy ralladisima. Así que, prefiero ir poco a poco, y así las ralladuras son menos intensas y mas superables. 

Aquí va la primera "pequeña dosis". Hoy me gustaría hablar de las personas inseguras y con autoestima "cero". De esas que necesitan constantemente que les recuerdes, aunque no lo sean, lo maravilloso, guapo, fuerte, inteligente y un largo etcétera de piropos que son. 

Os pongo ejemplos y seguro que todos conoceréis a alguien así y de camino lo entenderéis mejor. ¿Quien no tiene un amigo o amiga que, por ejemplo en Twitter tiene 1000 seguidores? Y claro, tu te preguntas ¿de verdad conoce a todas esas personas? ¿incluso conoce a uno que vive en el Congo Belga? en fin... ¿Y quien no conoce a alguna persona que en sus fotos de Instagram tiene casi mas "me gusta" en una foto que el numero de seguidores? y encima sin poner hanstams, y además de gente que ni son del mismo país, ni tienen ningún tipo de relación, ¡¡¡¡y ni siquiera se siguen!!!!! ¿que raro no?. Aaahhh claro!! no me acordaba que para todo esto existen unos programitas o apps que lo mismo te generan seguidores en Twitter que Likes en tus fotos de Instagram. Y lo mas patético es que, estas personas se lo creen y todo, al mismo tiempo que se piensan que los demás somos gilipoyas y no nos damos cuenta de la verdad. Pero esta gente son felices inmersos en su mundo de Yupi. 

Creo que si este tipo de personas supieran que, todos los que vemos esto desde fuera de su mundo de Yupi nos parece patético, desinstalarían esos programas generadores de mentiras y se darían cuenta que es preferible tener menos gente en Twitter, pero al menos es gente verdadera y real, y menos Likes en Instagram, pero sabes que quien te ponga uno, te lo pone de corazón, y no porque te lo generó un programita que lo único que puede hacer es meterte un virus en tu móvil o portátil, jodiéndote bien jodido y todo por un seguidor mas o un Like mas. En fin...

Pero ellos son felices así, y se sienten importantes (¡ilus@s!). Y al sentirse importantes sus inseguridades desaparecen, y su autoestima crece. Pero lo que en realidad no saben es que, cuando vuelvan al Planeta Tierra y descubran que todo es una mentira, sus inseguridades regresaran multiplicadas por mil y su autoestima caerá tan baja que para volver a recuperarse necesitaran un buen numero de consultas con el psicólogo. Pues bien, decirles que la gente normal nos damos cuenta de todo. Que la gente normal no necesita 1000 seguidores para sentirse importante. Mejor poquitos pero reales. Y que la gente normal tampoco necesita 150 likes para tener la autoestima a "3000MSC", con unos poquitos bastan, pero de gente que te lo puso porque quiso y no porque lo generó un programa. Y es que esos truquitos ya nos lo conocemos. 

Pero bueno, esto solo es un consejo, en absoluto quiero imponerle a nadie lo que tiene o no tiene que hacer con sus redes sociales. La gente es libre de hacer lo que quiera y si haciendo eso, una persona se siente mas segura y con la autoestima por las nubes, pues allá ellos, pero yo prefiero vivir en el mundo real y no en el de Yupi... ;) Besitos y hasta la próxima dosis.